sábado, 17 de octubre de 2020

Ilusiones---

 


                                                     Ilusiones

Flor Alba se sentó en aquel lugar, en donde antes había estado situada la vieja arteria y se puso a llorar; pero no, no era que pensara que todo tiempo pasado fuera mejor,  lloraba al recordar su enorme trasero. Entonces habló en alta voz; sin importarle si la escuchaban los demás transeúntes.  

¡Hay que tristeza! La vida es muy cruel, todo pasa y a mí sólo me queda este trasero enorme; mi novio me dejó, el único hombre que he amado de verdad. Pero en fin ¡Qué le vamos a hacer!  Al final de cuentas una cosa he aprendido; tenemos el cuerpo que hemos construido, en él se hallan ocultas nuestras viejas pasiones y todos nuestros temores; tal vez,  en otra vida pueda tener un cuerpo con unas nalgas más pequeñas. Menos territorializado. Observó, pero nadie la miraba, las gentes no la veían ¡Era imposible qué  con ese enorme trasero no la vieran!  Casi gritó  asustada, se colocó en medio de la calle y los carros la atravesaban de lado a lado;  entonces llegó a la conclusión de que todos dormían y tan solo ella estaba despierta; ya que al menos,  se daba cuenta, era consciente de que tenía un enorme trasero.

 Entonces exclamó ¡Cuán pequeños somos! Una nada.   ¿Pero y  mi trasero?

¡Total!  Era lo único de lo cual podía sentirse orgullosa; con decisión cruzó la esquina y un hombre, un solo hombre,  la miró y le guiñó los ojos.

 Ella se puso feliz; ya que al igual que ella, él tenía unas enormes nalgas.

 Narraciones Beatriz Elena Morales Estrada @ Colprinth 

                                             

No hay comentarios:

Publicar un comentario